La asociación aragonesa Movimiento hacia un Estado Laico ( MHUEL ) expresa ante todo la felicitación a la ciudadanía y al Ayuntamiento de Zaragoza por el desarrollo de las fiestas de esta ciudad en un ambiente de tolerancia , respeto y buena organización . Tan sólo tenemos que lamentar y condenar la violación sufrida por una mujer , que fue contestada rápida y contundentemente por parte de los colectivos y del Ayuntamiento mediante la paralización de las fiestas , a la vez que se realizaba una concentración de condena del hecho y apoyo a la víctima.
MHUEL opina que las llamadas fiestas en honor a “ Nuestra Señora del Pilar “ -terminología obsoleta- , dada la secularización de la sociedad zaragozana , deberían denominarse Fiestas Grandes de Zaragoza sin ningún menoscabo hacia el componente religioso y respetando en todo momento las creencias y devoción hacia la Virgen del Pilar .
Actualmente hay tres actos durante estas fiestas de carácter religioso ; la ofrenda de flores , la ofrenda de frutos y el rosario de cristal. Respecto a la ofrenda de flores no dudamos de su primigenio carácter religioso , pero la realidad nos indica a todas luces la amalgama lúdico festiva de la exaltación del traje regional , la parte floral y la participativa sin un significado concreto que ataña exclusivamente a las creencias procediendo a un desfile multicolor de muy difícil definición.
En el actual marco constitucional vigente y en clara alusión al artículo 16.3 de la carta magna , quedaría bien plasmada la “coletilla” de la cooperación con las diferentes confesiones religiosas la propia organización de la ofrenda de flores por parte del Ayuntamiento de Zaragoza.
Dicho esto puntualizamos que cooperación no es sinónimo de participación . En referencia a la ofrenda de flores sigue siendo más que lamentable que la corporación municipal siga saliendo como tal precedida del estandarte de la ciudad , fruto de un reglamento de protocolo más propio de los años cincuenta del siglo pasado y que sigue sin ser derogado o modificado a pesar de las mociones presentadas en el pleno encaminadas a la normalización de la presencia de la corporación municipal en actos de marcado signo confesional.
Ni que decir tiene la grave impostura constitucional de los cargos públicos que ,en condición de tales , siguen saliendo vestidos de civil o con traje regional con la simbología propia de la representación plural ( Banda e insignia de concejal ) . Flaco favor al cumplimiento del principio de aconfesionalidad del Estado y sus Instituciones.
Recordar también a los que sin el uso de distintivos de representación común , confunden el término de participación “particular” . INDIVIDUAL , PRIVADA o PARTICULAR ; conllevan el anonimato del cargo de representación . Un acto individual nos remite a la sencillez de la participación neutral de la persona en sí sin exposición pública ateniéndose a su propia libertad de conciencia y de libre participación. No portar distintivos de representación pero ocupar sitios preferentes en calidad de cargo público , publicitar la presencia del cargo en la ofrenda o tener que parar el acto para la incorporación del mismo ; no nos parecen conductas adecuadas de actuación en los fines del cumplimiento de la laicidad del Estado.
MHUEL pretende en todo momento hacer pedagogía positiva del laicismo institucional para avanzar hacia una sociedad con verdaderos valores laicos y allanar el camino después de muchos años sombríos de imposición de un mugriento nacional catolicismo que subyugaba a las personas a base de mentiras e invenciones históricas .
El respeto , la tolerancia y la esencia democrática del laicismo , dependen en gran medida de la capacidad de conocimiento y discernimiento en el significado de la separación entre Iglesias y Estado .