En 2015 habrá elecciones. Por fin tendremos ocasión de expulsar de las instituciones a los partidos políticos que han hecho perder a la ciudadanía derechos, libertades y también dinero público. Mucho.
Porque a los partidos políticos se les conoce mejor revisando lo que gastan que escuchando lo que dicen, y el hecho de no tener un Estado laico y la existencia del Concordato con la Santa Sede tienen consecuencias económicas negativas para la ciudadanía en diversos ámbitos.
Esperamos que quien asuma el relevo político nos escuche. Desde MHUEL, MOVIMIENTO HACIA UN ESTADO LAICO denunciamos y proponemos
DENUNCIAMOS:
Que hasta hace unos años la Iglesia Católica era la mayor propietaria inmobiliaria después del Estado, pero gracias a las inmatriculaciones pronto será la institución que tenga más propiedades en este país.
PROPONEMOS:
La modificación de la ley Hipotecaria para impedir que la Iglesia Católica se apropie de inmuebles y terrenos
La elaboración de un censo de propiedades que son Patrimonio Histórico- Artístico y están en poder de las confesiones religiosas
El listado de bienes inmatriculados por la Iglesia Católica y su denuncia por apropiación.
Que con el gobierno actual se está dando preferencia en la cesión de terrenos a entidades privadas religiosas en detrimento de la puesta en marcha de servicios públicos.
Un compromiso de no cesión de terrenos a órdenes religiosas
La denuncia de conciertos con entidades religiosas en enseñanza y sanidad
La reconversión de las capillas existentes en edificios públicos en locales para usos no religiosos
Que los convenios de colaboración que se establezcan para gestionar servicios de carácter asistencial o de tiempo libre se establecerán con organizaciones que no tengan ideario religioso y que potencien valores integradores.
Aumentar las vías en centros públicos, en aquellas zonas con mayor número de centros concertados y promover la no renovación de conciertos
Eliminar todos los símbolos religiosos de los centros escolares sostenidos con fondos públicos.
Inspeccionar los conciertos educativos concedidos eliminando todos aquellos que no cumplan los requisitos de ratio o que tengan vías vacías
Que la religión se enseñe en las parroquias, y no en las escuelas.
DENUNCIAMOS
Que la Iglesia disfruta de una financiación pública encubierta, dedicada al mantenimiento del culto y del clero a través del IRPF y goza de importantes exenciones fiscales.
Unos pocos datos,
La Obra Pía de los Santos Lugares recibe 30,1 millones este año.
Las clases de religión nos cuestan 96 millones al año
El Estado les adelanta más de 13 millones de euros mensuales. Y Nunca justifican sus cuentas. La opacidad es absoluta.
PROPONEMOS:
La eliminación de la casilla a favor de la Iglesia Católica en el IRPF
La reclamación del pago del IBI a todas las propiedades de todas las confesiones religiosas
La modificación de la ley de Mecenazgo para eliminar privilegios fiscales a las confesiones religiosas.
DENUNCIAMOS:
Que el Estado restaura su patrimonio pero luego la Iglesia lo explota económicamente, cobrándonos entrada, sin transparencia alguna y NO declarando esos ingresos en la Agencia Tributaria. Les llaman Donativos ¿Recuerdan el caso de la Catedral de Santiago?
PROPONEMOS:
La desamortización paulatina de bienes de la Iglesia Católica mantenidos y restaurados con dinero público
La reclamación del pago del IVA y transparencia en los cobros que se hacen como entrada a los templos y museos religiosos o que
Que la Administración que ha hecho la inversión, se haga cargo de los fondos que se puedan obtener de la venta de entradas.
Que muchos edificios civiles, que pertenecen a la ciudadanía, parecen recintos religiosos por la abundancia de simbología confesional. Así mismo, las autoridades públicas mantienen rituales del nacional-catolicismo en sus actos públicos.
La eliminación de todos los símbolos religiosos de los edificios públicos
La no concesión de honores, distinciones ni nombramientos a advocaciones, santos ni símbolos religiosos.
Que en los Reglamentos de Protocolo conste que los ediles, concejales y parlamentarios como representantes de la ciudadanía no podrán participar en actos religiosos: procesiones, misas, ofrendas. Solo a nivel particular
Que los actos públicos oficiales sean exclusivamente civiles y sin connotaciones religiosas
Respetamos a todas las personas, pero pensamos que aquellas que tengan creencias, deben mantener con su dinero a sus religiones. No debe ser el Estado el que aporte dinero público para adoctrinar, ni para mantener el patrimonio de la iglesia, ni para pagar sueldos de religiosos. De ninguna religión.
La mezcla del Estado y la Iglesia tiene consecuencias negativas. El laicismo es un escudo que nos protege de la tentación de desviar recursos públicos a entidades religiosas.
Esperamos de nuestros representantes una defensa seria de la laicidad del Estado.